• Basada en un cuento del escritor Mario Bellatin
  • Proyecto en conjunto que dio como resultado una “opera-cine”
  • Martes 8 de enero a las 19:00 horas, Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes

 

El Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) invita a la proyección de la película Bola negra, basada en un cuento de Mario Bellatin, cuya música se debe a Marcela Rodríguez. Ambos comentarán la cinta al final de la exhibición y entablarán una charla con el público.

 

La cita de esta actividad, organizada por la Coordinación Nacional de Literatura, es el próximo martes 8 de enero a las 19:00 horas en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes.

 

Bola negra es un proyecto en conjunto creado por la compositora Marcela Rodríguez y el escritor Mario Bellatin, en el que logran conjugar sus profesiones, dando como resultado final una “ópera-cine”, como según la describen los propios autores. La historia está basada en un cuento de Bellatin incluído en Tres novelas (2005), al cual se le integró la música, creando así un film experimental con una ópera adentro.

 

La película se rodó en Ciudad Juárez con un coro conformado por jóvenes que viven en situaciones de riesgo en ese lugar, justo porque el propósito del proyecto fue ayudar a las personas que han vivido o estado cerca de la violencia, con el único fin de acercarse a la realidad social del país y mostrarla porque ellos como artistas, según han mencionado, no podían quedarse con los brazos cruzados.

 

Endo Hiroshi protagoniza esta historia, entomólogo japonés que una noche de insomnio recuerda su travesía por un lugar en África en el que estuvo antes, donde encontró un extraño insecto hasta entonces inclasificado. Después de guardarlo en un frasco y llevárselo para analizarlo en casa, descubre que el insecto se ha convertido en una pequeña bola negra, a partir de lo cual hace deducciones que lo llevan a tomar una serie de decisiones que le cambian la vida por completo.

 

En esta historia el entomólogo discurre entre diversos análisis acerca del mundo y después de llegar a conclusiones importantes decide comenzar una autodestrucción de sí mismo, hasta terminar por comerse. Detrás de esto hay una denuncia de la realidad social de la que es víctima Ciudad Juárez actualmente y que, como han dicho, en este trabajo se revela por medio de  una óptica donde prevalece lo poético y simbólico.

 

Mario Bellatin (Ciudad de México, 1960) Narrador. Estudió ciencias de la comunicación en la Univesidad de Lima. Ha sido director del área de literatura y humanidades en la Universidad del Claustro de Sor Juana y de la Escuela Dinámica de Escritores. Fue miembro del SNCA, 1999-2005. Becario de la Fundación Guggenheim 2002. Premio Nacional Xavier Villaurrutia 2001 por Flores. Premio Nacional de Literatura Mazatlán 2008 por El gran vidrio. Parte de su obra ha sido traducida al alemán, italiano, portugués e inglés.

 

Entre su obra se encuentra, en cuento: Pájaro transparente (2006). En novela: Mujeres de sal (1986), Efecto invernadero (1992), Salón de belleza (1994), Poeta ciego (1998), Tres novelas (Efecto invernadero, Canon perpetuo, Salón de belleza, 1995), El jardín de la señora Murakami (2000), La escuela del dolor humano de Sechuán (2001), Shiki Nagaoka: una nariz de ficción (2001), Lecciones para una liebre muerta (2005), Pájaro transparente (2006), Los fantasmas del masajista (2009), El pasante de notario Murasaki Shikibu (2010), Disecado (2011), La clase muerta (2011). Y en varia invención: Obra reunida de Mario Bellatin (2005) y Condición de las flores (2008).

 

Marcela Rodríguez (Ciudad de México, 1951) Su obra comprende: solos para diversos instrumentes, canciones, música de cámara, sinfónica y dos óperas. Desde l979 escribe continuamente música para teatro, trabajando con los principales directores de México. También ha escrito música para danza.

 

De sus obras más importantes podemos destacar sus dos óperas: ópera “La Sunamita” (grabado en CD) estrenada en 1991 en el festival de La Ciudad de México (transmisión en 1994 por la Televisión Española Canal Plus), y “Séneca o todo nos es ajeno”, su “Concierto para Flautas dulces y Orquesta” (1993). Cuenta con un sinnúmero de participaciones tanto  en música de cámara como en música vocal.

 

Alguna de sus colaboraciones con la UNAM, son: Homenaje a Margo Glanz. Apariciones para cello solo (1998). Concierto: Vértigos concierto para percusiones y orquesta (2002). Concierto para Cello y Orquesta. OFUNAM (2003). Presencias Homenaje a Ramón Xirau (2004). Prometo Homenaje a Juliana González. Para Cello (2007), entre otras.