• Participarán Eduardo Abaroa y Miriam Mabel Martínez
  • El tema de la mesa será Escritura, arte y sus vasos comunicantes
  • “Las artes siempre coquetean con otras expresiones, es un ir y venir. No existe en nada la pureza absoluta, es casi antinatural”: Miriam Mabel Martínez

 

Desde siempre arte y literatura han tendido puentes y se han alimentado mutuamente. Juntas han gestado diversos lenguajes híbridos: ¿cómo se extienden y despliegan en conjunto? Durante esta sesión del ciclo “Letras expansivas” se buscará darle respuesta a esta pregunta con la participación de Eduardo Abaroa y Miriam Mabel Martínez, bajo la moderación de Rocío Cerón, en una mesa denominada Escritura, arte y sus vasos comunicantes. 

 

Esta actividad gratuita, que se llevará a cabo el 8 de julio, a las 19:00 horas, en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia, ubicado en Nuevo León 91, colonia Hipódromo Condesa, Ciudad de México, contará con la presencia de Miriam Mabel Martínez, quien ha escrito catálogos para algunos artistas. En su experiencia, al redactar este tipo de textos, asegura sentir gran responsabilidad pues, aunque no se diga, está presente la idea de que el acercamiento será positivo, y esa idea la incómoda.

 

“A mí me gusta ver la obra y enfrentarme a ella como un espectador quizá un poco más sensibilizado, capaz de traer a la lectura de la pieza otras travesías intelectuales, hacer del ver un juego de relaciones, un acto, sin duda, posmoderno, en el cual está presente la propuesta de los estudios comparados y de la estética relacional, la cual no solo funciona para hacer arte: también es una forma de mirar”, dijo en entrevista.

  

Aunque reconoce que no es historiadora de formación, siempre le ha interesado la historia y, aunque no es artista, tiene un especial interés en el arte. “Soy escritora y me intereso por otras expresiones que me enriquecen y que deleitan no solo la mirada, sino el pensamiento”, aseguró. Por eso cuando la invitan a escribir sobre un artista, primero investiga todo acerca de este, pero sobre todo le gusta contemplar, enfrentarse a lo que la pieza es “a lo que yo -con mi circunstancia y background- soy capaz de observar, de sentir, de pensar…, luego dejo que la pieza me interrogue”. 

 

Y ya a la hora de escribir,  a Miriam Mabel le interesa transmitir al otro la curiosidad de ver la pieza y sabe que ese otro quizá verá otras cosas, quizá sin coincidir con ella, quizá sí, “pero al verla le da vida, la hace presente. Eso es lo que me interesa”. Para ella la literatura es un arte y escribir sobre arte es una vertiente, dijo. Por ello como  todas las artes se entrelazan siempre, unas llevan a otras. “Son puentes. Son tejidos. El diálogo es necesario”. 

 

Para Miriam es necesario derrumbar fronteras. “Qué sino son los libros de artista. Eso es  la obra del grupo Cobra, la de los situacionistas, la poesía concreta. Narrar, trazar. Crear. Indagar. Las artes siempre coquetean con otras expresiones, es un ir y venir. No existe en nada la pureza absoluta, es casi antinatural”, finalizó.